De hecho, pedalear por Lancaster es la mejor manera de conocer sus rincones ocultos. Júntate con tus compañeros y organiza un paseo en bicicleta que finalice en el pub The Water Witch. Siéntate fuera y tómate un descanso mientras ves pasar los barcos.
La cocina sin tabiques y la sala de estar de Penny Street dan a un patio central. Asómate a tu balcón para ver quién está sentado en los escalones de madera de abajo y únete a ellos para comer. Si vives en una casa, puedes disfrutar de las vistas al patio desde tu dormitorio. Sean cuales sean las vista, este espacio es un remanso de paz alejado del bullicio del centro de la ciudad.
Prepara un festín en la moderna cocina completamente equipada. El lavavajillas se ocupará de limpiar las ollas y la vajilla que utilices. Si olvidas algún ingrediente, hay un supermercado justo al bajar las escaleras. Además, gracias a la gran mesa de la cocina, podrás comer en compañía si así lo deseas.
Si se te estropea el tostador o se te funde la bombilla del baño, el equipo de mantenimiento lo arreglará mientras estás en clase. Las cámaras CCTV, la conexión wifi y el servicio de lavandería están incluidos en el precio, por lo que no habrá gastos extra.